El Semilla se pudrió, explotó y prendió el ventilador en diálogo con Unilafe en Radio Universidad: “Estoy reventado las bolas de no entrenar, no hacemos un carajo”. Además aclaró que “en ningún momento, hablé mal de los dirigentes”.
El mediocampista creativo que estaba jugando su tercer campeonato en el club terminó alejándose del club tras una fuerte discusión luego del encuentro ante San Miguel con el Tano Salvador Pasini, en una decisión a la cuál se llegó de común acuerdo. En principio, Mallemaci primero se refirió a un periodista de Lafe Sport Tv y explico que no quería hablar “porque es seguir fomentando el puterío que creo el señor julio Domínguez en su programa”.
Luego, Semilla detalló la situación: “Dijo que hable mal del club y de los dirigentes y eso lo quiero desmentir totalmente porque yo jamás en la vida le falte el respeto a un dirigentes, jamás voy a hablar mal de un club al que le dedique tres años hermosos donde defendí la camiseta cuando quizás cada hincha demostraba su cariño conmigo donde peleamos juntos tres torneos, entonces yo sería un hijo de puta si hablara mal de Laferrere y mi me duele porque este periodista ¿sabes como se maneja? si vos no le regalas una camiseta después te liquida en su programa, así se maneja Julio Dominguez (Periodista de LafeSport TV). Yo ahora estoy llorando, sí, porque me duele. Es la realidad. Ahora, yo escuché a Fatiga (Sergio Luongo) decir que yo hablé mal de los dirigentes. En ningún momento, hablé mal de los dirigentes se lo puede decir cualquiera de mis compañeros que estaba en el vestuario“
Posteriormente, explicó los sucesos que desencadenaron en su salida: “Hubo discusión, hubo puteada, lo putee a Pasini y sí es verdad, porque estoy podrido de ese señor pero es mi decisión, pero lo putee a él. Pero jamás le falté el respeto a un club, yo vivo a 10 o 20 cuadras ¿Cómo voy a putear a un club? ¡Es una locura eso!”.
Además, el reciente ex jugador de Lafe reafirmó que “el problema es puntualmente con Pasini y yo ahora te lo estoy diciendo porque acá se hablaron muchas boludeces. Yo no tengo interés de hablar mal de nadie, las cosas que pasan en un vestuario o en el fútbol muere ahí, pero acá se hablaron muchas cosas demás. Mi problema puntual es con él”.
A continuación le echó en cara al técnico Villero del rendimiento del equipo y poca preparación que según él tenían para los partidos: “Había días que hacíamos una hora y media de loco y entrenábamos 20 minutos y a veces no hacíamos nada. No te estoy mintiendo, cualquiera que va a la práctica lo ve. Todos sabemos que es así. Algunos hablan otros no. No importa, a mí me tocó y estoy reventado las bolas de no entrenar, no hacemos un carajo ¿Qué querés que haga? Yo no me llevo la plata de arriba, yo si quiero voy a seguir callado pero no loco, yo quiero entrenar, quiero estar bien porque cuando me tocaba entrar no podía correr ni diez minutos y no hago nada. Más allá que lo tenemos al profe que nos hizo hacer un poquito de velocidad y después no hacemos un carajo, entonces la culpa es nuestra también, este presente. Es jodido porque encima hablando de esta manera soy el hijo de puta, pero a mí me están buscando y tengo que aclarar porque yo no soy así. Yo de Laferrere el primer día me enamoré porque tuve la suerte de pelear dos campeonatos con esa tribuna y con esa gente. De los dirigentes no tengo nada que decir si nos cumplieron siempre. Tenemos un problema y están ahí preguntándonos que pasa. Es una locura.”
Por último adosó estar tranquilo en la relación con sus compañeros: “Gracias a Dios todos mis compañeros me mandaron mensajes apoyándome. Yo me quedo tranquilo que la banque lo que más pude. Saben lo que di por Laferrere y saben lo que soy para ellos.”
Así está Lafe. Un manojo de nervios que supo explotar en uno de los jugadores, que por desgracia tuvo que dejar el club. Mallemaci no pudo soportar más los manejos del Tano Pasini, se encontró acorralado y explotó. Ahora le prendió mecha a una bomba que explotó. Aún quedan muchos interrogantes: ¿Es cierto que el Tano no entrena? ¿Hay otros jugadores que reconocen esta situación y callan? ¿Es solo la calentura de un jugador que se tuvo que ir por no ser tenido en cuenta? Lo cierto, es que el Verde de La Matanza está lejos del reducido, lejos en lo futbolístico y encima pierde a un jugador de esos que cambian el ritmo del partido. Lafe no está para bollos.
Alejandro Tempone
(@aletempone)
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