Y un día, San Martín volvió a ganar. Tras 4 fechas sin alegrías, el elenco tucumano jugó como una final el partido ante Flandria y el desarrollo mostró eso. Apenas un minuto pasó del juego, Bucci robó un balón por izquierda, asistió a Lentini que solo debió definir para abrir el marcador.
Con la ventaja, el santo movió los hilos del juego. Con Matías García y Juan Galeano en un gran nivel y los aportes de Diego Bucci, la ofensiva fue una maquinita en la noche de Ciudadela. El ex Santamarina y Gonzalo Rodríguez tuvieron para aumentar la ventaja pero la defensa impidió el tanto en la primer chance y el oriundo de Aguilares se comió un gol increíble en la oportunidad que tuvo.
Cuando el telón del primer tiempo estaba por bajar, Matías García frotó la lámpara, capturó un rebote en el área chica y con un sablazo cruzado ponía el 2 a 0 en el tanteador.
Para el complemento y con la diferencia ya a su favor, el elenco de Cagna se encargó de mantener la pelota y hacer correr el reloj. Flandria tuvo situaciones esporádicas para lograr el descuento pero se encontró con Taborda de buen partido y la solidez de Francisco Oliver jugando en un puesto que no es el suyo por el lateral izquierdo.
En el debe queda mejorar el aspecto de la definición. San Martín jugó un gran partido pero tuvo situaciones para que la diferencia sea aún mayor y no estuvo fino. Gonzalo Rodríguez tuvo su peor noche ante el arco y deberá bajar revoluciones para volver al gol. En el complemento, turbo y Lentini tuvieron dos chances cada uno para estirar la diferencia pero no pudieron acertar al arco o Griffo se los impidió.
Foto gentileza: Prensa Oficial San Martín Tucuman
Maximiliano Barraza
(@NahuelMBarraza)
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